Establecimiento de una villa española en el valle de Carangue
La Villa de San Miguel de Ibarra fue fundada el 28 de septiembre de 1606, por el Capitán Cristóbal de Troya, bajo la orden del presidente de la Real Audiencia de Quito, Miguel de Ibarra y bajo el mandato del Rey Felipe de España.
Desde esa fecha hasta hoy son 415 años. han pasado de una hermosa experiencia de sus habitantes, que la han convertido en la CIUDAD BLANCA del Ecuador, con sus maravillosas expresiones de riqueza y belleza natural, que la han convertido en un auténtico patrimonio de quienes la habitan.
Fue construida en el valle del Carangue, en los terrenos donados por Juana Atabalipa, nieta del Inca Atahualpa, como una necesidad de tener una ciudad de paso en el camino Quito - Pasto y con rápido acceso al mar; la Junta Soberana de Quito, el 16 de noviembre de 1811, le dio el título de ciudad a la villa de San Miguel de Ibarra. Más tarde, el 11 de noviembre de 1829, el libertador, Simón Bolívar, nombró a la ciudad capital de la provincia.
Sus personajes, hombres y mujeres ilustres, sembraron el camino de acciones exitosas, que nos hacen sentir el mejor orgullo de ser ibarreños e ibarreñas, que sabemos amarla y respetarla, mientras nos llenamos el corazón y el alma para establecer un compromiso de trabajo decidido y eficaz, para alcanzar la más alta cumbre del éxito.